Los estafadores no duermen: ¿cómo conseguir un micropréstamo sin caer en el fraude?
Hoy en día, muchas personas tienen miedo de pedir microcréditos por muchas razones, empezando por los elevados intereses (en comparación con los bancos) y terminando por la alta probabilidad de ser víctima de un fraude. Si en el primer caso la razón no es tan de peso, porque los importes concedidos son pequeños y para un plazo corto, la situación con los estafadores es más preocupante. Entonces, ¿cómo protegerse y obtener un micropréstamo sin ser estafado?
Puede suceder que se tope con una institución de microfinanciación (IMF) fraudulenta que oculte una serie de condiciones y, una vez firmado el contrato, tenga que devolver más dinero de lo esperado. Una artimaña para estafar de este tipo de organizaciones es que no se detienen en un límite de reembolso prescrito por la ley. Si se retrasa en los pagos, no sólo le cobrarán intereses, sino también multas y sanciones. Por ley, no se debe pagar la deuda indefinidamente; no puede superar 1,5 veces el valor del préstamo. Pero los estafadores no se detienen ante este límite y siguen cobrando intereses, multas y sanciones infinitamente.
Por lo que respecta al cobro de la deuda, también los estafadores vulneran las reglas. Cuando emiten un microcrédito sin poner condiciones estándares y sin imponer restricciones, posteriormente exigen ilícitamente el reembolso de una cantidad que a la larga puede resultar inasequible. Se emplean diversos métodos abusivos: por ejemplo, transferir las deudas a cobradores ilegales encargados de presionar al prestatario de forma psicológica o bien empleando violencia.
Otro peligro que entrañan las IMF fraudulentas es el uso de los datos personales que usted ha introducido durante el proceso de solicitud. Se dan casos en los que a su nombre se emiten otros préstamos.
Para conseguir un micropréstamo sin que le engañen, solicítelo a IMF de confianza, como las que encontrará en nuestro sitio web, que gozan de buena reputación.
Si busca una organización de microfinanciación por su cuenta, para protegerse mejor de posibles acciones fraudulentas, verifique si la organización de microfinanciación está incluida en el registro estatal. También debería fijarse en si los datos especificados en el acuerdo coinciden con los datos de la IMF.
Además, incluso si una IMF está inscrita en el registro, fíjese bien en los documentos que le piden firmar para concederle un préstamo a la hora de concluir el contrato. Lea atentamente todas las cláusulas y, si tiene dudas, es mejor dedicar su tiempo a conocer las condiciones que luego caer en un hoyo financiero. Las condiciones del préstamo no cambiarán para usted hasta dentro de cinco días.
Asimismo, para evitar que le estafen le aconsejamos que no se deje ayudar por las personas que ofrecen su ayuda en la tramitación o aprobación de un préstamo. Este servicio es de pago, pero los que lo ofrecen son en su mayoría los potenciales estafadores.
Para obtener un microcrédito sin ser estafado no hay que creer en las promesas excesivas ni en las ofertas ilusorias.